Los sectores privados de la economía panameña parecen haber encontrado la fórmula para no estar expuestos a la política y las dificultades financieras del Gobierno central, que cerrará este año con déficit de 720 millones de dólares sobre el Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Un informe de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (APEDE), basado en estadísticas de la Contraloría General de la República, revela que la economía panameña creció 7,5% al cierre del tercer trimestre de este año. El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) proyectó que la economía nacional crecerá 6% sobre el PIB al cierre de este año.
Arístides Hernández, director del centro de estudios económicos de APEDE, sostuvo que el fuerte crecimiento se debió en gran parte al repunte sostenido en las actividades de la Zona Libre de Colón (ZLC), al turismo, a los casinos y el crecimiento de la industria de los juegos de azar en el país, y en menor medida al comercio y las actividades inmobiliarias, los puertos y el ferrocarril.
Sin embargo, APEDE coincide con el pronóstico del MEF en que la economía cerrará el año con un crecimiento del 6% debido a las restricciones financieras del Gobierno, el despido de empleados públicos, el aumento del precio del petróleo y la incertidumbre que generan las reformas tributarias en materia de inversión.