El sector del juego en Panamá continúa creciendo aceleradamente. Hasta septiembre del 2003, el total apostado (de acuerdo con el informe de apuestas de los operadores de juegos de suerte y azar) era de 825.9 millones de dólares, y según se calcula esa cifra final será largamente superada, alcanzando así una suma que superaría los mil millones de dólares.
Las apuestas en juegos de suerte y azar ha estado empujada principalmente por la actividad en las mesas de juego (aumentó en 19.7 millones de dólares) y en las máquinas tragamonedas (subió en 102.7 millones de dólares).
Después de la privatización de Casinos Nacionales en 1998, el récord del total apostado se había registrado en el 2002, cuando la recaudación alcanzó los 963.6 millones de dólares.