Los empleados del Hipódromo de las Américas aseguraron que la concesión otorgada a la empresa española Codere fue ampliada de forma irregular durante la administración del expresidente Enrique Peña Nieto, por lo que le han solicitado a la presidenta Claudia Sheinbaum revisar el contrato.
Según explicaron, la concesión original, con vigencia de 25 años, vencería este año. Sin embargo, se extendió anticipadamente por el mismo periodo, con lo que la tendrán hasta 2050.
Los trabajadores también denunciaron despidos injustificados, acoso laboral y reducción de derechos, así como complicidad del sindicato encabezado por Isaías González Cuevas. De acuerdo a las fuentes consultadas por el periódico Contra Réplica, el sindicato cobra incluso cuotas a empleados sin contrato y muchos han sido despedidos sin recibir ni la mitad de su liquidación legal.
Asimismo, se denunció el uso indebido del Hipódromo como recinto para eventos masivos y conciertos, lo cual no está autorizado en la concesión vigente.
En el ámbito fiscal, los empleados señalaron que Codere enfrenta problemas con el Servicio de Administración Tributaria (SAT). En mayo, la Suprema Corte de Justicia de la Nación informó que la empresa debe pagar más de MXN 1.272 millones (USD 66 millones) por impuestos, recargos y multas derivadas del ejercicio fiscal de 2008. La Corte avaló que el crédito fiscal es exigible, pese al intento de amparo por parte de la empresa.
Finalmente, los trabajadores alertaron sobre posibles irregularidades en las carreras de caballos, como el uso de nombres falsos o intercambio de ejemplares entre cuadras, lo que podría constituir un fraude en las apuestas.
Ante estas denuncias, exigieron una revisión integral de las operaciones de Codere en México, ya que también administra casinos y salas de juego en otras partes del país.