La Asociación del Personal de los Hipódromos, Agencias, Apuestas y Afines de la República Argentina (APHARA) celebró esta semana sus primeros 76 años de vida, en el marco de un tiempo clave para la actividad: la salida de la pandemia y el plan de reaperturas para la llegada de la nueva normalidad.
“Queremos saludar y hacer llegar nuestros afectos a todas las trabajadoras y trabajadores del Hipódromo de San Isidro, del Hipódromo de Palermo, de sus salas slots y de las agencias hípicas de todo el país en este momento difícil que atravesamos producto de la pandemia. Cada crisis que atravesamos supimos entre todos volver a superarnos”, reflexionó Diego Quiroga, secretario general de APHARA.
La crisis sanitaria afectó de lleno a la industria hípica, una de las más golpeadas por el COVID-19. Ahora, en un contexto en que se aceleran la vacunación de la población y bajan los contagios de manera exponencial, el desafío por delante es “la vuelta del público al turf”, para que la actividad “resurja como en sus épocas de esplendor”.
El referente sindical del turf valoró en la figura de su maestro y antecesor, Miguel Quiroga, “la lucha de aquellos compañeros que a lo largo de décadas hicieron grande a esta organización con la búsqueda permanente del bienestar de la gran familia del turf, y la defensa a ultranza de los derechos, puestos y fuentes de trabajo de los trabajadores hípicos”, y finalizó: “salud y empleo constituyen una prioridad indivisible”.