La confirmación del traspaso del Juego a la Ciudad había sido originalmente incluido en el temario de la sesión pasada, debiendo postergar su tratamiento para este jueves por no tener los votos necesarios, siendo esta una de las cuestiones por las que el PRO ha venido bregando desde que asumió el poder en la Ciudad, durante el primer mandato de Mauricio Macri.
En concreto, en la jornada legislativa prevista para este jueves, se estaría convalidando el marco normativo que dará lugar a esta asunción de competencias en materia de juegos de azar por parte de la Ciudad y la Ley que dará los parámetros de la autoridad de aplicación.
Además, aparte de buscar la conformidad y ratificación del mencionado Acuerdo, el Cuerpo parlamentario pondrá en consideración la ley que dará lugar a la creación de la Lotería de la ciudad de Buenos Aires Sociedad del Estado (LOTBA S.E.), disolviendo el actual Instituto del Juego de Apuestas.
Se trata de una nueva Sociedad de Estado que funcionará como autoridad regulatoria y de aplicación sobre las operaciones del Hipódromo de la Ciudad, las dos salas de Casinos de Buenos Aires instaladas en los buques y la red de 1.200 agencias durante el período de transición que se extenderá hasta que se agoten los derechos otorgados por la jurisdicción federal a los operadores transferidos.
Un traspaso que será llevado adelante por un Comité Ejecutivo (integrado por Lotería nacional y el Instituto de Juegos de Apuestas de la Ciudad, posteriormente LOTBA) que coordinará y ejecutará todas las acciones necesarias para efectivizarlo, a partir del cual la Ciudad profundizará las fiscalización y el monitoreo de la actividad.
Cabe señalar que desde el Gobierno porteño se ratificó el compromiso con el control de la actividad y con la reducción de los daños sociales que la falta de fiscalización y regulación habían provocado.
En tal sentido fue que en mayo de 2016 fueron cerrados los cinco bingos que con las concesiones vencidas que funcionaban en territorio porteño.
Es un dato importante que desde ese mismo mes los operadores de juego comenzaron a pagar Ingresos Brutos por primera vez en la historia de la Ciudad, reconociendo una deuda existente por tal concepto desde 2003, acogiéndose a la moratoria dispuesta por la Ley 5616 para cancelarla.