En la actualidad, en los nueve casinos de la provincia de Buenos Aires se operan un total de 2.600 máquinas tragamonedas, lo que representa un mercado atractivo para todo operador internacional involucrado en este segmento.
Por ello, una serie de medios periodísticos (entre los que se encuentran medios nacionales como Clarín y Perfil, entre otros) aseguraron esta semana que la gobernadora María Eugenia Vidal tendría a la firma un expediente para abrir una licitación el año entrante, en lugar de prorrogar los actuales convenios. Según estos trascendidos, el gobierno bonaerense busca avanzar, con la redacción en conjunto entre el Instituto de Loterías provincial y la Secretaría de Legal y Técnica, en un pliego licitatorio de 600 fojas para conceder este segmento del juego provincial.
Incluso se adelantó que ya estaría calculado el costo de los pliegos para ingresar a esta licitación (los mismos tendrían un valor cercano a los 20.000 dólares) y se estima un piso de oferta mínima de 100 millones de dólares para operar, durante 15 años con opción a 5 más, las slots de los casinos de Mar del Plata y la costa bonaerense.
La licitación que busca implementar Vidal tiene un punto importante: es para empresas radicadas en el país. Y hay otro factor a tener en cuenta: los 100 millones de dólares que teóricamente pediría la provincia son estimados "excesivos" por operadores de juego. De acuerdo al esquema buscado, las empresas que proveen las máquinas tragamonedas obtendrían entre un 40% y un 47% de la recaudación, pero de ese monto deben descontar todos los gastos operativos, de personal y de logística.
Según Perfil, desde el Instituto de Lotería sostienen que la inversión es necesaria por la renovación en infraestructura de algunas salas, y por la inversión que se deberá hacer en tragamonedas, ya que solicitarán nuevas máquinas.
De acuerdo a lo señalado en una nota del Diario Clarín, la gobernadora Vidal recibió en estos días un informe sobre el proceso de licitación, acercado por Melitón López, titular del Instituto de Loterías y Casinos, y los pliegos se confeccionaron entre ese organismo y la secretaria de Legal y Técnica, que ocupa Julio Conte Grand.
Según este medio, tras el cierre de las actuales concesiones (vigentes al menos hasta marzo de 2017) se abrirían dos licitaciones: una para la provisión de los tragamonedas en los casinos y otra para el control online de las mismas. Y los adjudicatarios deberían ser empresas diferentes, porque la segunda controlará a la primera.
La intención (dicen en La Plata a Clarín), es que el llamado se publique este mismo mes, para que a principios del año próximo se pueda licitar. Todo ello teniendo en cuenta que los actuales convenios vencen en el mes de marzo próximo. “La intención de la gestión de Vidal es no prorrogarlos, sino concesionarlos”, aseguran fuentes a Clarín.
Otro de los puntos importantes a tener en cuenta ante esta información es que tres casinos quedarían fuera del paquete de licitaciones: la sala del Casino Sasso de Mar del Plata, el del Sierra de la Ventana, y el más importante de este grupo, Trillenium de Tigre, donde operan 1.400 máquinas tragamonedas.