Los vendedores de Lotería del Quindío observan una caída en sus ventas físicas. El principal motivo está en el hecho de que la impresión de los boletos es realizada en distintas zonas de Colombia y estos no han podido ser transportados ya que múltiples vías terrestres se encuentran cerradas por la situación social del país.
Rocío Acosta Jiménez, gerenta de la Lotería del Quindío, informó que la segunda semana del paro fue la más crítica de todas: "Dejamos de vender 40.000 fracciones en relación con el 6 de mayo. Llegó este paro en un momento desafortunado porque aspirábamos aumentar las ventas tras arrancar con el nuevo plan de premios". Vendieron un 30 % menos que en el último sorteo llevado a cabo el jueves 13 de mayo.
"Este paro ha afectado a todo el mundo y nosotros no somos ajenos al momento. Es que las loterías no están llegando por los trancones en las carreteras nacionales, no hay billetes para vender. Hemos dejado de percibir el diario", expresó un lotero del Quindío. El paro nacional también afectó a otras loterías nacionales como las de Medellín, Bogotá, Cruz Roja, Santander o Manizales.