El presidente de la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) de Paraguay, Carlos Liseras, informó que desde el ente presentaron una denuncia penal por la exposición de máquinas en la vía pública, en el marco de la Ley 6903, que establece las medidas de protección de menores de edad ante las máquinas de tragamonedas.
Liseras, quien asumió en agosto del año pasado, explicó que esta ley tiene vigencia desde 2022, pero recién fue reglamentada a fines del año pasado. “Todas estas máquinas que se ven por las calles en almacenes, quioscos, peluquerías, etc, a la intemperie, son juegos clandestinos”, expresó en diálogo con el medio local 680 AM.
El funcionario recordó que la autoridad competente en materia de tragamonedas son los municipios en coordinación con la Conajzar y aclaró que los juegos de azar son actividades legales pero bajo medidas estrictas, por lo que si una persona quiere dedicarse a la actividad debe solicitar un permiso y luego pedir a la Conajzar un registro de operador.
Carlos Liseras
Parte de los requisitos, según el reglamento, es que toda persona que quiera dedicarse a las máquinas, debe contar con un salón cerrado con la frase “Prohibido el ingreso de menores”. Además, debe contar con un salón destinado al uso exclusivo de esa actividad.
“Todas esas máquinas que vemos a la intemperie son hechos punibles que están cometiendo las personas a cargo de las mismas y que tienen una expectativa de hasta 5 años de cárcel o multa”, reiteró Liseras. Asimismo, enfatizó en que su uso produce "gran daño a los niños y jóvenes" y aseguró que con posterioridad se convierten en “pequeños ladrones porque tienen que robar para seguir jugando”.
Según informó el periódico La Nación, el funcionario señaló que, además del daño que esto causa en los niños y sus familias, "genera un incalculable daño económico que se produce al no pagar el canon respectivo por el uso", que va en detrimento de la Dirección de Beneficencia (Diben), cuyo presupuesto está solventado en un 70 % por los cánones que transfiere la Conajzar.