Los inversores de la empresa CIRSA —la cual fue adquirida mayoritariamente por la firma de gestión de capitales Blackstone— anunciaron su decisión de postergar los planes de salida a bolsa de la multinacional del sector del juego y ocio con sede en España.
Según informó SBC News, la decisión de aplazar los planes de una oferta pública de venta (OPV) se tomó en conjunto con el cambio de identidad legal de la firma, que pasó a llamarse CIRSA Enterprises, y frenaría la salida a bolsa de CIRSA durante 2024.
Cabe señalar que, durante 2023, se informó de que “Blackstone estaba considerando una salida a bolsa de CIRSA por valor de más de USD 3.000 millones, lo que supondría una prima significativa sobre los USD 2.000 millones que el fondo de capital riesgo adquirió del grupo hace unos seis años”.
Así, las últimas cuentas de la empresa detallan que CIRSA posee una tesorería neta de EUR 231 millones y una liquidez de capital de EUR 530 millones, mientras que su deuda financiera neta se situó en EUR 2.200 millones de euros, lo que refleja un ratio de apalancamiento de x3,6 EBITDA.
A su vez, bajo la propiedad de Blackstone, CIRSA ha ampliado su presencia internacional, lo que le ha llevado a adquirir Modena Giochi, una empresa italiana de máquinas, y una participación del 60% en el operador italiano de juego online ePlay24.
En dicho contexto, el director financiero de la firma, Antonio Grau, afirmó que CIRSA tiene “potencial para aumentar las actividades de adquisición debido a la mejora de su salud financiera”, pero que la dirección mantendrá un “enfoque conservador en las adquisiciones”.
En esa línea, desde la empresa advirtieron que “se requiere un enfoque conservador en 2024, ya que CIRSA se enfrentará a un año de cambios normativos en las leyes españolas sobre el juego, el cumplimiento y las obligaciones operativas”.
Además, el gobierno español pondrá en marcha el Real Decreto sobre Entornos de Juego Responsable como ley nacional en 2024, marcando la siguiente fase de la revisión regulatoria del juego español. La nueva legislación pretende garantizar que el juego español cuente con la vigilancia más estricta de los operadores y las actividades del mercado en Europa.
Por último, señalaron que a pesar del aplazamiento de la OPV, “los buenos resultados de CIRSA en 2022/2023 y las adquisiciones estratégicas son señal de una empresa segura de su trayectoria de crecimiento y estabilidad financiera”.