Tras casi dos meses de permanecer cerrado, esta semana el Bingo Morón fue finalmente autorizado por el Instituto de Lotería y Casinos de la Provincia de Buenos Aires (IPLyC) a reabrir sus puertas. La decisión trajo tranquilidad a los trabajadores del establecimiento operado por Codere.
La sala de juegos había sido clausurada el 30 de junio debido a que en una inspección de rutina “se detectó que la sala de fumadores estaba desbordada”, lo que representa una infracción a la normativa vigente por la afectación de la salud del resto de las personas que asiste a ese tipo de lugares.
“Además, había obras no declaradas ni el final de los trabajos respectivos”, habían declarado desde la dependencia provincial encargada de controlar el funcionamiento de esas salas, según informó el medio Primer Plano Online.
A partir de las medidas adoptadas por las autoridades, la empresa realizó las reformas, se comprometió a cumplir las restricciones y normativas, y se autorizó nuevamente la puesta en funciones.
Desde los gremios Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA) del Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar (ALEARA) celebraron la reapertura ya que, a pesar de que no dejaron de percibir sus salarios, los ingresos de los trabajadores se vieron afectados porque el suplemento de las propinas no existía.
En diálogo con Primer Plano Online, Ariel Fassione, secretario gremial de ALEARA, expresó: “Estamos entre la alegría de lo que fue la reapertura de Bingo Morón y todavía luchando con el tema las salas de San Martín y Lomas de Zamora, que siguen cerradas. Hablé con los delegados y todos contentos por volver a los puestos de trabajo. Esperemos que esto sea ya de manera definitiva”.
“Esperemos que ambos temas pendientes puedan ir resolviéndose, porque encima de la situación que estamos viviendo, con devaluación, revisión de paritarias, pedidos de bonos, todo es preocupante. Pero todo esto con los lugares abiertos permite que se pueda negociar mejor con la patronal”, concluyó.
Semanas atrás se había informado que, además de la de Morón, las salas de San Martín y Lomas de Zamora permanecían clausuradas por idéntica irregularidad: edilicia y administrativa.
En esa ocasión, Domingo Bruno, secretario de UTHGRA Morón, una de las cuatro seccionales que firmó una solicitada en la que se alertaba sobre las continuas clausuras a los bingos de Codere, había expresado el estado de alerta del gremio: “Es un caso atípico que todavía no pudimos descifrar”.