Los operativos se adelantaron en Aranjuez, Belén y en el centro de la capital antioqueña.
Según cálculos de la entidad, por la operación de estas 103 máquinas retiradas se dejan de recaudar aproximadamente 253 millones de pesos al año, por concepto de derechos de explotación que se hubieran destinado al financiamiento del sistema de salud en Colombia.
Juan B. Pérez Hidalgo, presidente de Coljuegos, afirmó que los buenos resultados se obtuvieron gracias al trabajo con las autoridades distritales y a las denuncias de la ciudadanía, que facilitaron detectar la operación ilegal en establecimientos de comercio.
El directivo resaltó que todos los juegos de suerte y azar deben estar autorizados por la entidad y recomendó a los jugadores que se cercioren de la legalidad de los juegos antes de efectuar apuestas y así evitar posibles engaños. “Con la operación ilegal, se afecta el recaudo para la salud pública de los colombianos. La ilegalidad es un flagelo que debemos combatir entre todos”.
Los implicados en la operación ilegal detectada serán sancionados con $55 millones de pesos por máquina retirada y pueden enfrentar prisión de seis a ocho años.