En caso de prosperar la iniciativa, el Estado se sumaría a Nevada, Delaware y Nueva Jersey que ya lo han regulado. La implementación sería relativamente rápida -no más de 12 meses- según explicaron miembros de la Gaming Control Board, ante una pregunta de la senadora Kim Ward en relación con el proceso de legalización y puesta en marcha del juego online.
Desde este organismo de control se añadió además la posibilidad de permitir registros de ámbito interestatal al igual que han hecho en Nevada o Delaware. Es decir, permitir registros de jugadores que no se hallen físicamente en el Estado.
En términos de números, se expusieron cifras similares a las de Nueva Jersey en su primer año de actividad online, con una expectativa de ingresos de unos U$S 120 millones.