Tenían un procedimiento administrativo y se les llamó en diferentes oportunidades para que entregaran los documentos que se requieren para el funcionamiento de este tipo de salones; al no hacerlo decidimos cerrarlo”, indicó el alcalde. A su vez advirtió que desde el pasado año se han cerrado cinco establecimientos que no cumplían con los permisos.
El burgomaestre de Libertador explicó que “tiene que haber un referendo popular sobre la existencia del casino, si es ganado por las personas que hicieron la solicitud se aprueba la apertura y luego tiene que ser avalado por la Comisión Nacional de Casinos y además tener permiso del municipio”.
Las autoridades insistieron en que no será el único casino cerrado, pues realizan procedimientos en cada salón de envite y azar en Libertador.
En Diversiones Las Vegas trabajaban más de 60 personas por turno (tres turnos al día) dando algo más de 180 empleos directos además de los indirectos, en donde se contempla mantenimiento, cocina y los proveedores de alimentos y bebidas. El salario de los empleados era el básico, más las propinas. El cierre los obliga a buscar trabajo en otra parte.
Por su parte Silvia Martínez, contadora del local, explicó que “empezaron a trabajar en el año 2002. En octubre del pasado año se introdujo un amparo tras estar cerrados un año, de manera que eso permitió comenzar nuevamente en diciembre; y ese amparo todavía nos protege”.
A su vez manifestó que no se oponen a los procedimientos administrativos pero sí “al maltrato que sufrieron la gerente y varios trabajadores del casino”.