l acuerdo comenzó a vislumbrarse luego que el juez Fernando Guzmán abrió la sesión llamando a las partes a un avenimiento, factor que gatilló el cambio en las posiciones iniciales con una negativa rotunda del querellado a modificar sus dichos y la de la parte querellante a pedir una retracción completa de estas declaraciones.
En principio, las partes postergaron la audiencia hasta el jueves “con el objeto de tratar llegar a un acuerdo en principio”, señaló Calderón, quien indicó que tras sostener una conversación con Alfredo Etcheberry “al explicarme qué es lo que me está pidiendo como afectado, creo que es razonable, pero eso requiere traspasar la buena intención al papel”.
Consultado por la factibilidad del acuerdo, el abogado de Cirsa, Alfredo Etcheberry, manifestó que “sí existe esa posibilidad. Aquí el juez nos instó a que conversáramos para buscar una solución. Es un caso bullado y disputado, pero la conversación con el propio querellado nos hace tener fundadas esperanzas de que podamos llegar realmente a un acuerdo”.
Fuentes de Cirsa indicaron que las bases del acuerdo -cuya primera redacción afinarán esta tarde Etcheberry y el abogado de Calderón, Hugo Rivera- apuntan a que el querellado se retractaría de todos los dichos de relativos a eventuales vinculaciones de Cirsa y a su presidente (el empresario catalán Manuel Lao Hernández, querellante en este caso) referidos a operaciones de narcotráfico o lavado de dinero, a comparaciones con la sancionada compañía peruana AeroContinente y con la sociedad colombiana Winner Group. Indica que el acuerdo no incluiría lo declarado por el abogado del grupo Enjoy en relación a procesos judiciales y administrativos vinculados a Cirsa.