En ese prolongado encuentro, que se extendió por una hora y media, y en la que estuvo presente también el vicepresidente del Cuerpo, Carlos Bonicatto, el funcionario aportó pormenorizadas explicaciones de la norma (ya aprobada por el Senado) y respondió las numerosas consultas que le hicieron los legisladores.
La Porta no confirmó si en la reunión recibió la seguridad de que el proyecto será convertido en ley en la sesión que realiza la Cámara baja provincial. No obstante, calificó como “espectacular” el resultado del plenario y el valor institucional de su visita, enriquecida por la inquietud y conocimiento que trasuntaron los diputados en sus distintas requisitorias.
A la vez, definió a la iniciativa como “instrumento vital” en la lucha que las autoridades desarrollan para ponerle fin a las apuestas ilegales. Reconoció que el precepto, una vez sancionado por Diputados, se transformará en una herramienta vital para “acabar con poderosas organizaciones”.
Como un ejemplo del crecimiento de la recaudación del juego oficial, informó que en enero de 2005, la quiniela ascendió a 85 millones de pesos (28 millones de dólares), que en el mismo mes de este año sumó 130 millones de pesos (42, 9 millones de dólares). A su juicio, la captura de un “juego que no tributa” (el clandestino) abre para la provincia de Buenos Aires un futuro promisorio en la materia mencionada.