Los ejecutivos de Polla Chilena de Beneficencia se reunieron con el presidente de la Corte Suprema de Justicia de Chile para expresarle su preocupación por la proliferación de máquinas tragamonedas ilegales. El presidente del directorio de la empresa, Sergio Henríquez, recalcó que este negocio está manejado por verdaderas mafias que obtienen ganancias que superan los diez mil millones de pesos anuales.
"Estas máquinas se instalan sin ningún contrato, no pagan impuestos, y los dueños sólo van a recoger las monedas que han recaudado (...) hoy día hay diez mil máquinas, hace dos años habían no más de 200, fue la primera vez que se importaron y tenemos detectado quién lo hizo", afirmó.
Henríquez agregó que actualmente "se están jugando más de seis mil millones de pesos en efectivo al mes en todo el país. Lamentablemente el juego de azar clandestino ha llegado a Chile". Junto con anunciar la presentación de diez querellas contra distribuidoras de máquinas tragamonedas, Polla Chilena solicitó al presidente del máximo tribunal de justicia, Marcos Libedinsky, que se adopten medidas más drásticas contra los responsables del ilícito.