Ante el conflicto desatado hace ya algunos días en Brasil en torno a los bingos y después de la decisión del Presidente Lula de prohibir el funcionamiento de dichas salas de juego en el país, la asociación que nuclea dicha actividad manifestó que buscará una salida política para resolver el tema.
La Medida Preliminar (MP) que prohíbe la explotación de todas las modalidades de juegos de bingo y máquinas tragamonedas, anula todas las licencias, permisos, concesiones y autorizaciones otorgadas anteriormente por la Caixa Econômica, gobiernos estatales y municipales. De acuerdo a lo anunciado, el incumplimiento de la MP implica el pago de una multa diaria de 50 mil reales (unos 17 mil dólares), además de medidas penales.
Mientras tato, Abrabin no descarta recurrir a la Justicia para garantizar el funcionamiento de las casas de juego existentes en el país. En Santa Catarina, por ejemplo, varias salas consiguieron recursos judiciales que les garantizan el funcionamiento de sus actividades.
”Abrabin no descarta la vía judicial para revertir el cierre de las salas de bingo en el país, al mismo tiempo que entiende que el tema debe seguir siendo tratado políticamente. Hay que mantener una lucha hasta que se consiga una aprobación del Congreso Nacional de una ley reguladora, justa y específica que garantice la estabilidad del sector”, manifestó la asociación mediante un comunicado.
Como fuerza sindical representativa del sector, Abrabin se apoya en la importante generación de empleo de los bingos como argumento para mantener la actividad a flote. “Alos bingos quieren seguir colaborando para cumplir con la meta establecida en la campaña del PT hacia la presidencia de la república: la generación de 10 millones de empleos. Como entidad representativa, advertimos que en este tema están en juego 320 mil puestos de trabajo vinculados a los bingos: 120 mil directos y 200 mil indirectos. Por lo tato, el cierre de las salas afecta directamente a cerca de un millón de brasileños”.
Para seguir tratando el tema, la entidad se reunía ayer con cerca de 30 representantes de asociaciones de bingos de los estados de Río, Santa Catarina, San Paulo, Ceará, Paraná y Río Grande do Sul.