a polémica medida entrará en vigor a partir del 1º de enero, y será entonces cuando los responsables y empresarios de las salas de juego y bingos de la Comunidad Valenciana hagan cuentas y valoren si les resulta redituable abrir sus salas o no.
Según manifestó el presidente de la Confederación Española de Organizaciones de Empresarios del Juego del Bingo (CEJ), José Luis Iniesta, “la subida fiscal, de 20 puntos, complica a un sector que cada año ve reducir el número de sus salas y que ha visto cómo en los últimos once años ha cerrado 121 salas”.
La Comunidad Valenciana es la comunidad autonómica española que mantiene más salas de bingo, 85 en total, dos menos que en 2000 y que a partir de enero de 2004 podría perder otros veinte negocios. Según fuentes del sector de bingo, Hacienda prevé ingresar por el 25% de la tasa fiscal comunitaria alrededor de 4.500 millones de pesetas o 27 millones de euros.