En el marco de un nuevo operativo a cargo del Instituto Provincial de Lotería y Casinos, en conjunto con el Ministerio de Seguridad, se realizó un allanamiento por juego ilegal en la localidad de Berazategui.
El local inspeccionado funcionaba como un kiosco desde donde se captaban apuestas ilegales de quiniela, ubicado en la calle 129 entre 18 y 19. Allí se detuvo a tres personas y se secuestraron teléfonos celulares, cuadernos con anotaciones, tickets con jugadas y equipos de fax.
Las inspecciones fueron coordinadas con la UFI 1 de Berazategui, a cargo del fiscal Gustavo Mora, en conjunto con la Comisión para la Prevención y Represión del Juego Ilegal, integrada por miembros del Cuerpo de Inspectores del Instituto y del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires.
Las causas quedaron caratuladas como asociación ilícita y defraudación al Estado por violación al Artículo 301 Bis del Código Penal ya que esta actividad ilícita, desde diciembre de 2016, dejó de ser una contravención y pasó a ser un delito que prevé penas de tres a seis años de prisión de cumplimiento efectivo.
Luego de una amplia investigación, personal policial del Destacamento Baigorrita, junto con efectivos de la Estación de Policía Comunal de General Viamonte y la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de esa ciudad, desbarataron una organización que se dedicaba a comercializar quiniela de forma clandestina y penada por la ley.
La investigación se concretó a partir de directivas del titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 5, Sergio M. Terrón; y la ayudante fiscal de General Viamonte, Mariana Monti, magistrados del Departamento Judicial Junín que en su momento fueron encomendando a los policías actuantes que realizaran distintas pesquisas en forma encubierta, agotando todas las instancias investigativas.
Por ello, desde el Juzgado de Garantías Nº 3 a cargo de María Laura Durante, libraron distintas órdenes de allanamiento y en las requisas, se confiscaron unos 50 mil pesos en efectivo (billetes de diferentes montos), varios teléfonos celulares; teléfonos/faxs; carpetas; cuadernos; anotaciones varias; libros de numerología relacionados al juego de la Quiniela y otros elementos de importancia para la causa.
Se determinó que las apuestas se realizaban en la clandestinidad, por lo que se determinó la imputación de tres mujeres residentes en Baigorrita, en el marco de la Investigación Penal Preparatoria (IPP) caratulada "juego clandestino".