Desde que fue aprobada en 2015, la Ley de Casinos de Chile viene siendo blanco de diversos cuestionamientos. De hecho, la crítica se acentuó con la reanudación del proceso de permiso de operación de los siete casinos municipales. Sin embargo, por el momento las autoridades no contemplan modificar la norma.
“Estamos en proceso de adjudicación. Empezar a discutir ahora sobre las necesidades de cambiar los marcos legales nos parece imprudente porque introduce incertidumbre”, aseguró Vivien Villagrán, superintendente de Casinos de Juego.
Si bien los casinos de Arica y Puerto Natales no despertaron el interés de los operadores y para el resto de las plazas los únicos oferentes fueron Sun Dreams -Pucón, Puerto Varas, Coquimbo, Iquique y Viña del Mar- y Enjoy -Pucón, Puerto Varas, Coquimbo y Viña del Mar-, la funcionaria explicó que el balance de la Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ) es satisfactorio.
“Si el objetivo hubiese sido solamente abrir una oferta para la industria, volverla tremendamente atractiva y no conciliar el objetivo de ingresos que tiene el municipio, probablemente uno podría haber tenido más oferentes, pero acá hay un objetivo de política pública vinculado al desarrollo local”, explicó.